Libro atribuido a un autor sagrado pero no admitido en
el canon de la Biblia por no haber sido reconocido por la Iglesia como revelado
o inspirado por Dios. 2. Escrito falsamente atribuido a un autor o a una época.
Tal atribución puede ser producto de un engaño. A veces un apócrifo es producto
de un heterónimo, es decir, de un ficticio autor inventado por otro. (Platas Tasende)
// Entre los libros apócrifos más famosos de la antigüedad están los Anales de
Egipto y los de Tiro, escritos por unos sacerdotes que no permitían su lectura
sino a los iniciados en la religión; fueron atribuidos por Porfirio a
Sankoniaton. Los Versos de oro de Pitágoras. Los Libros sibilinos, confiados a
la custodia de los decenviros; las poesías órficas, los fragmentos publicados
por Annio de Viterbo, con el título de Antiquitatum
variarum volumina XVII –Roma, 1498–, como obras originales de Fabio Pictor,
Beroso, Sempronio, Catón, Megasteno, etc. // Las Sentencias y Cartas conocidas
como de Diógenes el Cínico son apócrifas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario